TIPOS DE SIERRAS MANUALES - Materiales-construccion.com

El propósito de esta guía es resaltar ciertos diferentes tipos de sierras manuales en venta y también identificar para qué exactamente se emplea mejor cada sierra. Nuestro objetivo final es asistirle a reducir sus opciones cuando considere la posibilidad de adquirir una sierra de mano para el género de trabajos que vaya a efectuar.

En las secciones siguientes, hallará orientación sobre de qué manera usar una sierra de mano así como una descripción general de los modelos más populares de sierras de mano. Asimismo se ofrece información básica sobre sus primordiales peculiaridades, diferencias y usos. Entre las clases de sierras manuales más populares que vamos a tratar se hallan las herramientas usadas para recortar madera y placas de yeso, las sierras de espiga, las sierras de podar y otras muchas variedades esenciales de sierras manuales.

¿Qué son las sierras manuales?
Las sierras de mano (en ocasiones escritas como sierras de mano) son una pieza esencial en cualquier caja de herramientas bien surtida. En verdad, están a la altura de los martillos, esculpas y llaves inglesas en lo que se refiere a las herramientas más usadas para una serie de proyectos generales de mejora y mantenimiento del hogar.

Si bien las herramientas eléctricas modernas ofrecen una velocidad y comodidad fabulosas en muchas aplicaciones de serrado, no son en lo más mínimo una solución universal. Habitualmente, factores como la accesibilidad, la comodidad, el peso, la seguridad o bien la delicadez pueden hacer que una sierra manual sea una alternativa mucho mejor que una herramienta eléctrica.

Naturalmente, hay muchos géneros de sierras manuales libres. De la misma manera que con todas y cada una de las herramientas de corte manuales, saber qué género de sierra manual emplear para cada labor es esencial si desea conseguir los mejores resultados.

Índice

1 Clasificación de los tipos de serruchos manuales

Clasificación de los tipos de serruchos manuales

Como se ha indicado previamente, hay muchos tipos diferentes de sierras manuales. Ciertas están diseñadas para ser usadas como hojas de sierra de empleo general y versátil. Otras son herramientas especializadas diseñadas con precisión para un desempeño perfecto en labores de serrado considerablemente más concretas.

Llegados aquí, vale la pena indicar que los nombres de los diferentes géneros de sierras manuales básicas no siempre y en toda circunstancia son completamente congruentes entre los diferentes distribuidores, fabricantes y usuarios. Esto puede dar sitio a determinada confusión. Por servirnos de un ejemplo, ciertos géneros de sierra más habituales y las convenciones de nomenclatura que puede localizar al adquirir alguno de los diferentes tipos de sierras manuales fáciles de usar para madera son:

Sierra de corte longitudinal
Sierra de corte trasversal
Sierra de panel
Sierra de corte corto
Sierra de caja
Sierra de madera
Sierra de espiga
Sierra de espalda
Sierra de cola de milano
Sierra de podar
Sierra de yeso
Sierras de copete
Sierra de acabado fino
Sierra de calar
Sierra de mano
Sierra de bastidor
Sierra de arco
Sierra de punta dura
Sierras de ojo de cerradura
Sierra de punzón
Sierra de compás
Sierra de arrastre
Sierra Dozuki
Sierra Ryoba
Sierra Kataba
Sierra de asta
Sierra de chapa

Además de esto, en ocasiones hallará que múltiples de los nombres comunes enumerados previamente se usan prácticamente indiferentemente, refiriéndose de forma frecuente a lo que semeja exactamente a los mismos tipos de sierras manuales básicas.

Habitualmente, las diferencias precisas entre estos diferentes subtipos pueden ser sutiles. Por otro lado, si bien los diseños de las sierras parezcan diferentes, sus usos reales pueden ser afines.

Por poner un ejemplo, puede ver sierras para madera diseñadas para el corte directo de madera identificadas como sierras de corte al hilo, sierras de paneles o bien sierras de corte trasversal. Las sierras de espiga pueden aparecer como sierras de espalda o bien sierras de cola de milano en ciertos distribuidores.

Las distintas sierras de mano destinadas a recortar orificios, curvas y otras formas precisas incluyen sierras de perforación, sierras de ojo de cerradura, sierras de compás, sierras de calar y otras. Además de esto, ciertas herramientas pueden identificarse por otras peculiaridades completamente diferentes, como las sierras de acabado fino o bien los modelos para trabajos pesados.

Para facilitar las cosas, en esta guía nos vamos a centrar en las 4 categorías primordiales de sierras de mano conforme sus usos concretos de materiales: sierras para madera, sierras para metal, sierras para yeso y sierras para podar.

Guía los tipos de sierras manuales según los dientes por pulgada TPI

El TPI, dientes por pulgada, de las sierras manuales es una consideración verdaderamente esencial en el momento de seleccionar el mejor género de herramienta de corte manual para un trabajo o bien material concreto. En verdad, el TPI es de manera frecuente una de las mayores diferencias entre los diferentes tipos de sierras manuales que se ofrecen.

Para dar una visión general sencillísima del TPI, la regla general es que cuantos más dientes por pulgada tenga una hoja de sierra, más fino va a ser el corte (y más limpio el resultado final).

Como es de aguardar, esto quiere decir que las herramientas diseñadas para trabajos finos o bien detallados, como las sierras de calar o bien las sierras de corona, van a tener un mayor número de TPI. Asimismo se prefieren los números de TPI altos cuando se trabaja con maderas y metales más finos.

Las sierras de mano destinadas eminentemente a labores de menor precisión, como la poda de ramas, el corte de tablones o bien el corte de paneles de madera a la medida, acostumbran a tener un número de TPI inferior. De igual forma, los valores bajos de TPI acostumbran a ser la opción mejor para las maderas más gruesas, verdes y tratadas.

Las sierras para metales, empleadas eminentemente para recortar metal y plástico, pueden considerarse una salvedad a las reglas precedentes. Acostumbran a tener hojas de TPI parcialmente altas debido a las demandas físicas de esos materiales, mas raras veces se emplean para trabajos de detalle.

En concepto de una guía básica de TPI de sierras de mano, generalmente hallará productos clasificados en las próximas categorías aproximadas:

Las hojas con menos de siete TPI se van a vender normalmente como sierras de dientes gruesos
Las hojas con entre siete y once TPI se acostumbran a clasificar como sierras de dientes medianos
Las hojas con doce o bien más TPI se acostumbran a etiquetar como sierras de dientes finos

Tipos de sierra manual según su uso

Puede ser complicado identificar las mejores sierras de mano para recortar madera, puesto que “recortar madera” puede englobar una enorme pluralidad de trabajos. Aserrar un leño o bien una rama de un árbol es una labor muy, muy diferente a la de recortar un orificio limpio en un panel de muebles. Por otra parte, hacer una curva suave en una pieza de madera artesanal es absolutamente diferente.

Cada uno de ellos de estos escenarios requiere que el usuario corte a diferentes velocidades y fuerzas para asegurar que el trabajo se haga apropiadamente. Lógicamente, esto quiere decir que hay una “mejor” sierra de mano diferente para cada situación. Normalmente, es recomendable continuar la regla del TPI:

Utilice sierras de dientes finos para los trabajos que demandan una velocidad más lenta y una mayor precisión. Más dientes por pulgada acostumbran a implicar una hoja más fina, lo que quiere decir que el corte va a ser más limpio, mas el progreso mediante maderas más gruesas o bien duras va a ser gradual.

Las sierras de dientes gruesos son ideales para recortar de forma rápida materiales más gruesos o bien duros. Los espacios más extensos entre los dientes significan que pueden arrancar más madera con cada empuje de la hoja, mas el resultado final no va a ser particularmente limpio

Sierra de mano para recortar madera
Las llamadas “sierras de punta dura” pueden ser una alternativa económica y recomendable para una serie de trabajos fáciles de corte de madera. Acostumbran a ser sierras parcialmente básicas con mangos moldeados de plástico y dientes afilados y embrutecidos por inducción. Si bien muchas sierras de punta dura de empleo general pueden efectuar el trabajo en la mayor parte de las clases de madera, tenga presente que sus hojas tratadas no acostumbran a poder afilarse. Cuando los dientes de una sierra para madera de punta dura se han embotado, hay que mudar toda la herramienta. Esto causa que sean una alternativa más conveniente para las personas que solo usarán las sierras de mano para madera esporádicamente.

Sierras de mano para recortar metal
En el momento de seleccionar una sierra de mano para recortar metal, bastante gente opta por la sierra de arco tradicional, consistente en una hoja de sierra angosta y bastante flexible tensada entre los 2 extremos de un marco recio en forma de C. Esta herramienta fácil y familiar es una alternativa muy usada y fiable para recortar a mano chapas finas.

No obstante, de nuevo, vale la pena estimar otras facetas de la labor en el momento de seleccionar la mejor configuración de sierra manual para el trabajo. Tratándose de escoger sierras manuales para recortar metal, es esencial tomar en consideración lo siguiente:

Aun si ya ha decidido usar una sierra de mano para recortar la chapa, prestar atención a variables como el número de TPI y el material de la hoja puede suponer gran diferencia en la complejidad del trabajo. De la misma manera que ocurre con las sierras para madera, las sierras manuales para metal son más eficientes cuando el número de TPI y las propiedades del material coinciden:

Las hojas de menor TPI son mejores para trabajar con metales más duros o bien gruesos, como el hierro y el acero, mas van a crear un corte considerablemente más áspero.

Las hojas de mayor TPI generarán un corte más fino, mas en general se prefieren para metales más finos o bien blandos como el aluminio y el cobre.

Características de las sierras manuales

Como hemos visto previamente, existen muchos tipos diferentes de sierras de mano que se venden para una extensa y diversa gama de trabajos. Si se pregunta cuáles son los primordiales tipos de sierras de mano entre aquéllos que puede escoger, posiblemente las ligeras alteraciones en la terminología empleada por los diferentes distribuidores le resulten velozmente confusas.

El próximo diagrama le va a ayudar a conocer la anatomía de una sierra de mano con más detalle. Asimismo le va a ayudar a entender la terminología adecuada de cada componente de la sierra.

¿Qué son las sierras de espiga?

Una sierra de espiga es un tipo singular de sierra de espalda. Cualquier sierra con un espinazo reforzado puede llamarse sierra de espinazo, mas una sierra de espiga tiene usos y peculiaridades concretas para conseguir cortes controlados y de precisión en la madera.

¿Cuál es la definición de una sierra de espiga?

Acostumbran a ser bastante simples de reconocer, merced a las próximas peculiaridades identificativas

Una espina recia durante la parte superior (no tajante) de la hoja, en general hecha de acero, latón o bien (menos de forma frecuente) madera.

Las sierras de espiga acostumbran a tener una hoja bastante corta y robusta, que acaba en una empuñadura de pistola cerrada desarrollada para resguardar al usuario; generalmente, no se puede eliminar.

Los valores más habituales de la hoja de la sierra de espiga están entre diez y catorce, lo que da un corte más lento mas más controlado que las sierras manuales más gruesas.

Ciertas sierras de espiga están diseñadas para recortar solo en la carrera de avance (una “sierra de empuje”, en contraste a una “sierra de tracción”), si bien debe tener en consideración que no siempre y en toda circunstancia es de esta manera.

¿Para qué exactamente se usan las sierras de espiga?

Las sierras de espiga se emplean sobre todo para efectuar cortes cortos y precisos en trabajos de precisión exigentes, como la ebanistería o bien la fabricación de muebles. Las sierras de espiga deben su nombre a que se emplean frecuentemente para recortar piezas de madera más pequeñas o bien complejas, y singularmente para hacer uniones.

El propio espinazo de la sierra ayuda a eludir que la hoja de sierra se arquee o bien se doble a lo largo del corte. Asimismo limita la profundidad de corte que se puede hacer. Esto es preciso cuando se cortan juntas de mortaja y espiga, de ahí el nombre común de estos tipos de sierras manuales. Las sierras de espiga se emplean mejor para recortar mediante la veta de la madera, en vez de hacerlo durante exactamente la misma, para lo que se precisa una sierra de corte al hilo o bien una sierra de panel.

¿Qué son las sierras de poda?

Como su nombre señala, las sierras de poda manuales están concebidas para recortar veloz y sencillamente ramas, leños, ramitas y otros géneros de madera y follaje gruesos o bien toscos del jardín. Acostumbran a tener una hoja mínimamente larga, de manera frecuente encorvada, y un número de TPI bastante bajo para un serrado más eficiente de los arbustos verdes y vivos. Es frecuente ver sierras de poda plegables para facilitar su almacenaje a lo largo de todo el año.

Las sierras de poda más pequeñas y de hoja recta son ideales para recortar diámetros más finos de madera y ramas muy jóvenes, verdes o bien con mucha savia. Estas sierras de poda acostumbran a tener un número de TPI tenuemente superior, generalmente en torno a siete-ocho.

Las sierras de poda de hoja curva más grandes y con una mayor distancia entre los dientes (cinco-siete TPI) son mejores para las ramas más gruesas, viejas y duras. Este diseño más robusto deja quitar más de manera rápida ramas de arbustos y árboles de hasta unos cinco cm de diámetro. Se precisarán menos golpes, mas el corte no va a ser tan suave ni frágil.

Sierras para placas de yeso

Las sierras para placas de yeso, de manera frecuente llamadas sierras de pinchazo o bien sierras para paneles de yeso, están diseñadas particularmente para recortar orificios y huecos en paneles de paredes o bien techos.

Se identifican por sus hojas de longitud media y bastante angostas que se estrechan hasta una punta afilada. Las sierras para placas de yeso acostumbran a tener un mango encorvado en el extremo más ancho de la hoja. Su aspecto general es bastante semejante al de las sierras de calar y las dos tienen propiedades afines, a menos que la hoja de la sierra para placas de yeso acostumbra a ser más corta.

Los paneles de yeso acostumbran a estar hechos de una combinación de yeso, papel y probablemente madera contrachapada. Las sierras para recortar paneles de yeso son ideales para hacer recortes cerca de las tomas de corriente y otros accesorios o bien aparatos, en tanto que sus hojas de punta fina hacen que sea considerablemente más simple horadar el panel para comenzar el corte.

Estas sierras pocas veces se usan para cualquier género de trabajo de precisión, en tanto que el número de puntos por pulgada (TPI) tiende a ser parcialmente bajo en una sierra para placas de yeso, dejando un acabado bastante áspero que va a quedar escondo tras un panel de acabado. La hoja asimismo es algo flexible, lo que facilita los cortes en ángulo o bien en curva. Para trabajos de precisión en paneles de yeso, muchos profesionales tienden a emplear un cuchillo de seguridad, asimismo conocido como cúter o bien cuchillo Stanley.

Cómo afilar una sierra de mano

La cuestión de de qué forma afilar una sierra de mano brota de manera frecuente. Las sierras que se han empleado mucho, o bien que se han guardado de forma inapropiada a lo largo de largos periodos de tiempo, pueden terminar sintiéndose considerablemente más embotadas de lo que estaban originalmente. Cuando esto ocurre, acostumbra a ser bastante obvio tras unos pocos tirones o bien empujones de la hoja sobre el material de corte.

Con una sierra de mano embotada, la hoja no morderá de forma fácil al principio de un corte, las líneas son bastante difíciles de sostener limpias o bien precisas, y avanzar por medio de materiales más gruesos puede ser afanoso. Por contra, la mejor sierra de mano para recortar va a estar bien alineada y va a tener siempre y en todo momento los dientes afilados.

Afilar una sierra de mano no necesariamente es bastante difícil, mas es esencial efectuar la labor de forma conveniente y segura. Además de esto, ciertas sierras no son buenas aspirantes para ser afiladas primeramente. Por poner un ejemplo, este acostumbra a ser el caso de las sierras de punta dura, cuyos dientes han sido tratados y no están diseñados para un empleo permanente.

En el caso de ciertas sierras manuales más asequibles, puede resultar más económico substituir las hojas (o bien aun las herramientas completas), en especial en el momento en que se tiene presente el tiempo y otros materiales precisos para efectuar una reparación conveniente. Asimismo hay que tener en consideración que una mala técnica de afilado puede ser tan perjudicial como desatender la herramienta en primer lugar:

En el caso de las sierras de corte al hilo, si uno o bien 2 dientes terminan siendo un tanto más cortos que el resto (así sea por un empleo intensivo o bien por un afilado impreciso), lo más probable es que no se arruine por completo la acción de la sierra de mano

No obstante, si uno o bien 2 dientes terminan siendo más largos que el resto, comenzará a apreciar de forma rápida un incómodo arrastre y un temblor al aserrar.

En el caso de las sierras de corte trasversal, el “juego” de los dientes (sus ángulos alternados cara y desde la línea media de la hoja) asimismo puede precisar un ajuste con el tiempo. Si el juego de dientes es demasiado estrecho, la hoja puede atascarse al recortar. No obstante, si el conjunto de dientes es demasiado ancho, puede sentirse suelto en la ranura y enseñar una tendencia a deambular.

Dicho esto, en el momento en que haya comprado una buena sierra de mano, es realmente posible que desee tenerla en su kit de herramientas a lo largo de un buen tiempo. En un caso así, en algún instante deberá afilar los dientes. Una buena técnica de afilado de sierras puede asistirle a lograr grandes resultados con las sierras de mano a lo largo de muchos años de empleo intensivo.

Hay un procedimiento fácil y otro más complejo para afilar los dientes de las sierras de mano. El procedimiento más complejo (particularmente para las sierras de corte trasversal, como se ha indicado previamente) puede implicar cualquiera de múltiples herramientas auxiliares, como un afilador de dientes de sierra. Ahora se presenta un esquema práctico de la técnica de afilado más básica para sierras de corte longitudinal.

Herramientas que necesitará

Un tornillo de banco para sostener la hoja de sierra
Mordazas o bien madera para resguardar la herramienta
Una lima de molino (plana) y una lima de sierra cónica (triangular)

Las dos limas se hallan generalmente en buenos juegos de limas. Cualquier tamaño de lima triangular que encaje bien entre los dientes de la sierra va a ser conveniente.

Pasos

Primeramente, ponga la hoja de sierra lo más abajo posible en el tornillo de banco, dejando los dientes expuestos, puesto que esto minimizará el bamboleo y la flexión al lijar.

Ahora, utilice la lima plana para nivelar los dientes. Manténgala nivelada en la parte superior de los dientes, perpendicular a la hoja. Ejercite una presión ligera y uniforme de lado a lado durante toda la hoja, creando una pequeña parte superior plana en todos y cada diente. Va a poder ver estas nuevas partes superiores aplanadas como áreas refulgentes y relucientes cuando las mire al trasluz.

Hecho esto, va a deber pasar a la lima de sierra cónica. Ponga la lima en el hueco entre 2 dientes, levemente inclinada cara la punta de la sierra a fin de que se apoye en el espinazo del diente que se está afilando. Nuevamente, asegúrese de sostenerla nivelada y perpendicular a la hoja. Realice 2 o bien 3 pasadas laterales ligeras en exactamente la misma dirección para cada diente durante toda la longitud de la hoja, sosteniendo una acción y un número de pasadas incesantes cada vez

En el momento en que la parte superior refulgente y aplanada de cada diente se ha reducido a una punta de alfiler, todo a un tamaño consistente, la sierra ha sido afilada exitosamente. Asegúrese de probar su sierra de mano recién afilada y, si es preciso, vuelva a efectuar ajustes en pequeños aumentos hasta el momento en que se resuelva el inconveniente.

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